Para muchos lectores de X-Men, historias como Inferno o Trial of Magneto significan el cierre de una primera época de esplendor mutante en la isla nación de Krakoa. Esto se verá en los próximos meses con nuevos ejemplares #1 de varias series ya establecidas y nuevas. Y esto significa el cierre de otras como lo es Hellions, que concluyó de manera tan digna que quienes seguían este título lloraron con el mismo.

¿Quiénes son los Hellions?

Son un grupo de mutantes marginados seleccionados por uno de los villanos más importantes del alegre grupo de mutantes de Marvel: el Sr. Siniestro.

El equipo, conformado por John Graycrow, Nanny y el Orphan-Maker, Psylocke, Wild Child, Empath y el hermano de Cíclope de los X-Men, Havok, se convirtieron en uno de los grupos más queridos del fandom de los Hijos del Átomo.

Hellions fue más que un cómic de caos y destrucción absurdos. Hellions te presentó los pros y contras de colocar a un grupo muy disparejo a trabajar juntos. Desde el regreso de Madelyne Pryor, la incursión secreta a Arrako durante X of Swords, la invitación de gorrones de la Hellfire Gala y hasta los hechos que presenta este número final, quienes tuvimos el gusto de leerlo durante cerca de año y medio quedamos más que complacidos con un equipo que fue sorpresivo de principio a fin.

Tristeza, llanto y lamentos

Aunque la frase que encabeza este apartado de mi reseña se basa en una de las canciones más divertidas del grupo musical rock chileno Los Tres, lo escribí así porque es el sentir de quien escribe (y de muchos fans). Fue tanto el tiempo y las aventuras que los personajes tuvieron que a pesar de las dificultades y secretos del Sr. Siniestro, se vieron al final como una hermandad.

Las decisiones tomadas por el Consejo Silencioso de Krakoa, provocan el desbandamiento del grupo, con consecuencias personales para cada miembro del equipo. Cada uno lleva su propio peso por llevar y sus reflexiones personales tras un juicio que depende del lector.

Destacable es la oleada de emociones que ves en los personajes titulares, que van desde un conflicto con el equipo de X-Men krakoano, hasta exigir al Consejo Silencioso que tuvieran consideración de su compañero al verlo como un niño pequeño e indefenso. Por una parte, el asesinato de seres humanos perpetrado por Orphan Maker es el motivo de peso, y una razón de causa para que la sesión se llevará a cabo.

Más si lo vemos desde otro punto, las acciones del Consejo son arbitrarias, similares a lo visto durante House of X/Powers of X con Sabretooth, que es el primer enjuiciado con un exilio en las entrañas de la isla. Aunque se ve la justicia de Krakoa actuar, vemos la inflexibilidad de la mayoría de los miembros, a excepción de Nightcrawler, quien incluso intenta defender a Orphan Maker, sin importarle su posición en el grupo que rige a la nación mutante.

¿Se acaban los Hellions definitivamente?

Un cómic como este, que muestra la posibilidad de creatividad y decisiones increíbles que la X-Office en Marvel puede presentar, es una joya poco vista desde los cómics de los X-Men y equipos hermanos durante la década de los 90. Muchos nos identificamos con los Hellions y nos divertimos, lloramos, sufrimos y odiamos. No solo era la conjunción de villanos y héroes que son comodines, sino un disfrute de conflictos, supervivencia y al final aprecio y cariño entre ellos.

Respondiendo la pregunta que encabeza la sección, no volveremos a ver a la unidad en mucho tiempo, pero los personajes seguirán apareciendo en otros títulos, y con ansias esperamos que formen parte de los nuevos equipos que la franquicia ofrecerá después de Inferno.

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